domingo, 14 de diciembre de 2008

En esa Cruz


¡Como abruma, Señor tanto pecado
en esa Cruz que tú llevastes a cuestas!
¡Cuantas culpas y acciones deshonestas
hirierón el dintel de tu costado!


¿Cuantas veces, Jesús me has perdonado
y en amargo silencio me amonestas?
¿Que más preguntare? ¡Cuantas respuestas
nos da esa Cruz en la que estas clavado!


Cristo Jesús, mi corazón doliente
va meditando al par de tus dolores
todo el amor que en tu pasión me inspiras.


De rodillas me postro reverente
y te pido el perdón de mis errores
desde esa Cruz, donde colgado expiras.
Amén

(Autor: José Maria Zandueta)


No hay comentarios: